Reflexiones del PRI sobre las Escrituras | Fiesta de los Santos Simón y Judas, Apóstoles

Evangelio
Lucas 6, 12-16

Por aquellos días, Jesús se retiró al monte a orar y se pasó la noche en oración con Dios.

Cuando se hizo de día, llamó a sus discípulos, eligió a doce de entre ellos y les dio el nombre de apóstoles. Eran Simón, a quien llamó Pedro, y su hermano Andrés; Santiago y Juan; Felipe y Bartolomé; Mateo y Tomás; Santiago, el hijo de Alfeo, y Simón, llamado el Fanático; Judas, el hijo de Santiago, y Judas Iscariote, que fue el traidor.

Reflexión del Evangelio en palabras de Monseñor Don Fischer

Hay una manera interesante en la que debemos entender la distinción entre un discípulo y un apóstol. Discípulo significa aprendiz, alguien que crece y cambia constantemente. Y un apóstol es alguien que ha sido especialmente capacitado y enviado a realizar una tarea.

Lo interesante de ambos es que realmente son uno. Siempre aprendemos. Siempre estamos abiertos a nuevas perspectivas y nuevas maneras de ver el misterio de quién eres en nosotros. Y también sabemos que nos capacitas. Nos envías a hacer cosas. Nada es más importante que aceptemos ambos roles mientras continuamos creciendo y estableciendo tu Reino.

Oración final

Padre, bendícenos con la conciencia de que nunca terminamos nuestro trabajo contigo. Siempre estamos abiertos a nuevas perspectivas y cambios. Y también somos muy bendecidos por tener tu poder y tu fuerza fluyendo a través de nosotros mientras el Espíritu Santo nos impulsa a establecer el Reino. Te lo pedimos en el nombre de Jesús, amén.