Reflexiones del PRI sobre las Escrituras | Memoria de Santa Francisca Javier Cabrini, virgen

Evangelio
Lucas 17, 20-25

En aquel tiempo, los fariseos le preguntaron a Jesús: "¿Cuándo llegará el Reino de Dios?" Jesús les respondió: "El Reino de Dios no llega aparatosamente. No se podrá decir: 'Está aquí' o 'Está allá', porque el Reino de Dios ya está entre ustedes".

Les dijo entonces a sus discípulos: "Llegará un tiempo en que ustedes desearán disfrutar siquiera un solo día de la presencia del Hijo del hombre y no podrán. Entonces les dirán: 'Está aquí' o 'Está allá', pero no vayan corriendo a ver, pues así como el fulgor del relámpago brilla de un extremo a otro del cielo, así será la venida del Hijo del hombre en su día. Pero antes tiene que padecer mucho y ser rechazado por los hombres de esta generación”.

Reflexión del Evangelio en palabras de Monseñor Don Fischer

Si tuviéramos que resumir la obra de Jesús, diríamos que, en cierto sentido, vino a establecer el reino de Dios. ¿Qué es? ¿Cómo lo entendemos? Bueno, no es algo que podamos percibir como una cosa, un lugar o un momento concreto. Es algo que está entre nosotros, en medio de nosotros. Interesante!

Es la presencia de Dios con nosotros, ese es el reino de Dios. Y poco a poco, metódicamente, con paciencia, nos revela cada vez más quién es él y quiénes somos nosotros con él, y en él. Y esto sucede de una manera única. Llega en destellos de comprensión. Los llamamos momentos de crecimiento de la conciencia, una toma de conciencia de algo que nunca antes habíamos visto.

Uno tras otro, esos destellos de comprensión nos siguen llevando a la verdad de quiénes somos y cómo Dios anhela que estemos con él en el reino del que todos participaremos, generando una comprensión tras otra.

Oración final

Padre, te pedimos que nos bendigas con la capacidad no solo de comprender cómo funciona el Reino, sino también de sentir nuestro importante papel en él. Es algo que compartimos con toda la creación. Bendícenos con esa constante conciencia del movimiento, el crecimiento y la evolución que estamos destinados a experimentar mientras vivimos en esta tierra. Y te lo pedimos en el nombre de Jesús, Amén.